Todos sabemos que las patatas fritas saladas están cargadas de sal. Pero, ¿qué tal esa lata de sopa de aspecto inocente en tu despensa? Eche un vistazo más de cerca a su etiqueta nutricional y es posible que descubra que está cargada de sodio.
Según los datos disponibles, las seis principales fuentes de sodio en la población incluyen estos alimentos (¡algunos de los cuales quizás no haya visto venir!):
Productos de panadería: panes, biscochos, galletas, postres, galletas saladas, barras de granola.
Platos mixtos: pizza, cenas congeladas, ensaladas y comidas preparadas.
Carnes procesadas: salchichas, fiambres, hamburguesas, salchichas, jamon.
Quesos: todos los tipos, que a menudo también se encuentran en platos mixtos y platos de carne procesada
Sopas, salsas, dips, condimentos, aderezos; muchos también se pueden vender en variedades bajas en sodio.
Bocadillos, cereales para el desayuno, vegetales procesados y jugos.
¡Lo siento, amantes del queso! En el lado positivo: con esta lista de fuentes de sodio en mente, puede revisar las etiquetas de nutrición para comparar el contenido de sodio entre los productos. Ese es un paso inteligente para reducir el consumo diario de sodio.